BANCADA 609. PLUNA EN EL CENTRO
El tema central de la bancada
de hoy fue lo referido a PLUNA.
El lunes 16 de julio pasado, precisamente, se vota la ley que liquida esta empresa y que establece un mecanismo para que el Estado pueda hacerse de recursos para pagar créditos por los cuales asumió garantía. La ley que se vota también establece la creación de un FONDO de ADELANTOS DE CRÉDITOS LABORALES, que será financiado por rentas generales y que servirá para que los empleados de Pluna que estén en el Seguro de Desempleo, cobren, además de lo que paga el seguro, otro monto, complementario hasta alcanzar el monto del sueldo que vienen cobrando en actividad. La ley permitiría que el Estado negociara las "autorizaciones" de rutas que dispone con alguna empresa privada y que de esa manera el País recupere, de alguna manera, la conectividad con el mundo.
Nosotros hemos votado esta ley y hemos acompañado la decisión del Frente, en el sentido de no conformar una comisión investigadora y permitir que sea la justicia la que investigue todos estos negocios. El tema "PLUNA”, como se sabe, ya está en la Justicia y a ésta competerá establecer posibles responsabilidades.
De todas maneras, sin ponerme de Juez de nadie, y también aclarando que lo hacemos "con el diario del Lunes", tenemos una postura muy crítica con respecto a como se ha gestionado PLUNA a lo largo de los últimos 20 años. Primero los gobiernos blancos y colorados, con la participación de VARIG, que, realmente, vació a PLUNA y dejó un agujero enorme que pagamos todos los uruguayos (tuvimos que pagar 160 millones de dólares de pérdidas). Y luego viene esta última etapa donde nuestro Frente Amplio auspicia una participación de privados (Leadgate) que resulta claramente desastrosa.
Nos dicen que no había muchas más alternativas. Estamos convencidos que nuestros compañeros en el Gobierno, que han tomado las decisiones centrales en este proceso, no se metieron un sólo peso en el bolsillo y no hay nada desde lo ético para reprocharles. Pero eso no basta. Creo que tenemos que tener una definición clara sobre que política seguir con respecto a la aviación (al transporte aéreo), que no la tenemos y que hemos subestimado su definición, y a partir de esa definición, trabajar en un rumbo que permita superar errores y construir una herramienta útil al País.
El lunes 16 de julio pasado, precisamente, se vota la ley que liquida esta empresa y que establece un mecanismo para que el Estado pueda hacerse de recursos para pagar créditos por los cuales asumió garantía. La ley que se vota también establece la creación de un FONDO de ADELANTOS DE CRÉDITOS LABORALES, que será financiado por rentas generales y que servirá para que los empleados de Pluna que estén en el Seguro de Desempleo, cobren, además de lo que paga el seguro, otro monto, complementario hasta alcanzar el monto del sueldo que vienen cobrando en actividad. La ley permitiría que el Estado negociara las "autorizaciones" de rutas que dispone con alguna empresa privada y que de esa manera el País recupere, de alguna manera, la conectividad con el mundo.
Nosotros hemos votado esta ley y hemos acompañado la decisión del Frente, en el sentido de no conformar una comisión investigadora y permitir que sea la justicia la que investigue todos estos negocios. El tema "PLUNA”, como se sabe, ya está en la Justicia y a ésta competerá establecer posibles responsabilidades.
De todas maneras, sin ponerme de Juez de nadie, y también aclarando que lo hacemos "con el diario del Lunes", tenemos una postura muy crítica con respecto a como se ha gestionado PLUNA a lo largo de los últimos 20 años. Primero los gobiernos blancos y colorados, con la participación de VARIG, que, realmente, vació a PLUNA y dejó un agujero enorme que pagamos todos los uruguayos (tuvimos que pagar 160 millones de dólares de pérdidas). Y luego viene esta última etapa donde nuestro Frente Amplio auspicia una participación de privados (Leadgate) que resulta claramente desastrosa.
Nos dicen que no había muchas más alternativas. Estamos convencidos que nuestros compañeros en el Gobierno, que han tomado las decisiones centrales en este proceso, no se metieron un sólo peso en el bolsillo y no hay nada desde lo ético para reprocharles. Pero eso no basta. Creo que tenemos que tener una definición clara sobre que política seguir con respecto a la aviación (al transporte aéreo), que no la tenemos y que hemos subestimado su definición, y a partir de esa definición, trabajar en un rumbo que permita superar errores y construir una herramienta útil al País.
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